Simplemente llegas

Rafael Santacruz Gutiérrez

En mi vida te encontré, simplemente te vi.

¿Por qué, me gustas?

No sé, llegas de pronto, poco a poco sin pensarlo, como cualquier persona que pasa,

es tú caminar, diferente a las demás.

Fue un encuentro casual

Pasó el tiempo, te vuelvo a encontrar, tan bella, inquieta en tu mirar, de pronto entendí que algo nacía en mi mente.

Entras en mi vida como una transfusión que no es de mi sangre, hasta que la sentí

y comprendí, que ya dominabas mis sentidos, mi forma de hablar.

Comencé a buscarte en cada instante, anhelaba verte, quería me miraras, que te dieras cuenta que te amaba.

Todos dirán o preguntarán: ¿Porque deje todo atrás?

¿Porque comencé a olvidar todo lo que me rodeaba? Dejando compromisos, encuentros, momentos de vida, de música, de palabras vanas, quizás humanas, y solo quise demostrar sin importar quien fueras, que supieras cuanto te amaba.

Podría haber sido lo de todos los días.

Un gusto, una mirada que no significara nada, un destello de mañanas que terminan, pero no fue así, todo se ha quedado prendado en ti.

Tu aroma, tus cambios, tus encantos, tu belleza única, ese resplandor de sol que no ha cambiado en mi ojos al verte.

Pasaron los años, la vida, los encuentros, la conquista, el sabor de tu piel.

Mi corazón se alegró, mi añoranza creció por la vida. Pero de pronto se oscureció un día.

Un parpadear sin sentido que se marchó contigo, pero jamás lo hiciste realmente, porque ayer regresaste, sin temor,

Comprendiste al fin que si te amaba, que idolatraba todo tu existir,

tu amor, mi mejor motivo, para poder vivir.