Por: Nallely Urbina
Se realizan marchas, protestas y otras formas de lucha contra la violencia de género, pero esta sigue. De enero a la fecha, el Centro de Justicia para la Mujer (CJM), ubicado en la capital duranguense ha recibido dos mil 648 denuncias por violencia intrafamiliar y de tipo sexual.
Lorena Meléndez Manzanales, coordinadora de dicho centro, precisó que de enero a octubre emprendieron dos mil 446 investigaciones por violencia doméstica y 202 por abuso y violación sexual.
Pero estos casos solo corresponden a lo ocurrido en la capital, por lo tanto la cifra podría duplicarse, ya que falta el registro de Gómez Palacio y Lerdo, este último es el sexto municipio con más feminicidios en el país, según reportes del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Desde el confinamiento por la pandemia, el problema ha incrementado lo documentado en el CJM, muestran que los meses de junio, julio y agosto presentaron más casos de violencia sexual.
Si bien casi siempre los señalados como responsables son las parejas sentimentales de las víctimas, la directora destacó que también encuentran a tíos, hermanos y cuñados.
«En el ciclo de violencia que se vive dentro del núcleo familiar, todavía persiste el machismo», advirtió.
Para erradicar este pensamiento, en nuestro país se realizan protestas y otras actividades de concientización de las cuales Durango ha formado parte. Desde 1981, cada 25 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, fecha cuyo origen es un triple homicidio, el de las hermanas Mirabal, en República Dominicana.
Las activistas fueron asesinadas y se convirtieron en un símbolo latinoamericano de la lucha contra la violencia de género, que en el mundo mata a 137 mujeres por día, según refieren organizaciones civiles.
