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Por dinero y carencias deciden casar a sus hijos.
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La violencia ha incrementado con el confinamiento.
Sandra Luz Reyes Rodríguez, diputada local por el Distrito XV, señaló que, es complicado cambiar los usos y costumbres de los indígenas en el tema del matrimonio; afirmó que aunque poco a poco han cambiado las circunstancias, aún existe mucho por hacer.
Derivado de los sucesos registrados la semana pasada, en donde una jovencita de 14 años fue atacada por su pareja; la diputada Sandra Reyes, aseguró que cada vez son menos los matrimonios infantiles.
En este sentido, la Legisladora local, quien también es originaria del municipio de Mezquital, indicó que el querer cambiar los usos y costumbres de los indígenas, es un tema complicado; “en estas zonas todas las familias toman en cuenta siempre lo que dicen los adultos mayores; ya que son considerados los líderes de las comunidades y los que conocen lo que es bueno y lo que no”, dijo.
Así, expresó que poco a poco se ha logrado permear en la conciencia de algunos el que, el matrimonio a temprana edad no es bueno; lo que ha causado que, existan conflictos de ideologías; “ya los matrimonios infantiles no se dan como anteriormente; pero sí se registran y es necesario seguir trabajando en esta situación”, recalcó.
Puntualizó que, en la mayoría de los casos, estos matrimonios son «arreglados»; lo que significa que por dinero y carencias deciden casar a sus hijas.
Respecto al tema de la violencia, Sandra Luz Reyes Rodríguez, manifestó que sí es un tema constante, el cual tiene también que ver con los usos y costumbres; sin embargo a raíz de la pandemia, se registró un incremento en los casos; “lo que mucho les ha ayudado a estas comunidades es el tema de la educación; los niños y jóvenes han cambiado pero con el confinamiento y las nulas clases, se les olvida lo aprendido y regresan a lo que viven y saben desde pequeños”, concluyó.
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