• Se viven condiciones adversas en los 39 municipios por la falta de lluvias

Durango requiere de la solidaridad y apoyo de todos para salir adelante de las condiciones adversas que enfrenta por la sequía extrema, declaró el gobernador, José Rosas Aispuro Torres, al apelar al respaldo de los diputados locales y federales.

La semana pasada se reunió el Consejo Estatal de Protección Civil para evaluar los estragos de la escasez de lluvias y solicitar una Declaratoria de Emergencia.

Sin embargo, a pesar de no tener lluvias significativas desde el pasado 15 de septiembre, que ha derivado en poblaciones sin agua, incendios forestales y muerte de ganado, no se cumple con las exigencias técnicas para decretar que Durango está en sequía.

Es decir, no se puede solicitar una Declaratoria de Emergencia para que las familias afectadas reciban apoyo del Gobierno federal.

Los problemas se irán agravando, reconoció, y serán más familias sin agua en sus casas, bordos de abrevadero más secos y menos pasto para los animales.

Es necesario encontrar un camino para declarar a Durango en emergencia, por lo tanto, anunció que dialogará con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, y con el secretario de Agricultura, Víctor Villalobos, para atender la condición crítica que se vive.

Los gobiernos, de los tres niveles, tienen la obligación de garantizar agua para la población y apoyar al sector pecuario, actividad que permite a los campesinos tener un sustento.

“La convocatoria a los legisladores locales y federales, siempre ha estado abierta para sumar esfuerzos a favor de Durango, con mucho gusto voy a compartir la información para poder hacer esa solicitud. Aunque técnicamente no se cumplen los requisitos y no ha empezado la temporada de lluvias, en los hechos es que tenemos una situación atípica que hacía años no se presentaba, una sequía tan prolongada como la que tenemos hoy en día”, concluyó.

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