Pueblo Nuevo, Durango.- En días pasados, el rastro municipal tuvo que cerrar sus puertas por aproximadamente ocho días, debido a que las autoridades sanitarias solicitaron no se trabajará hasta cumplir con la instalación del sistema aéreo para sacrificar el ganado, indicó la regidora panista Beatriz Fernández, presidenta de la Comisión de Salud.

Manifestó que tuvieron visita de las autoridades sanitarias, quienes solicitaron como fundamental que se trabajara con el sistema aéreo en el rastro municipal, por lo que el personal de servicios generales ayudó en la construcción de este sistema y hoy en día, el rastro municipal opera con mucha mayor confianza e higiene.

«La Titular de salud ante el pleno de Cabildo, manifestó que en los próximos días buscarán una regulación con todas las personas que venden carne de cerdo preparada los fines de semana, ya que en muchos de estos lugares no matan en el rastro municipal, donde hay veterinarios que certifiquen la carne que se vende».

Al concluir, la Regidora aseguró que con estos trabajos la ciudadanía podría tener más confianza de la carne que sale del rastro municipal; el costo para que puedan matar sus vacas, es de aproximadamente 250 pesos.

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