La calificadora Moody’s, informó que la llegada de la nueva variante ómicron del COVID-19, plantea nuevos riegos para la economía del mundo.

La agencia indica que desde la aparición de la nueva cepa, diversos países han establecido nuevas restricciones de viaje. Lo anterior genera una incertidumbre a  nivel mundial.

«La amenaza dependerá de la transmisibilidad y virulencia de la nueva variante … la variante ómicron ha inyectado nueva incertidumbre», explican.

Así mismo, detallan que las políticas de salud pública que se establecieron para enfrentar las diferentes olas de contagios, otorgan alguna base para detectar los factores que precisarán el impacto económico y crediticio.

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Por otro lado, Moody’s menciona que la variante ómicron tiene un ventaja respecto a las anteriores, la cual es que esta cepa se detectó de manera temprana.

Lo anterior ayuda a que se pueden tomar medidas para evitar los contagios. Mientras que la vacunación es parte clave para frenar el aumento de casos positivos.

«El progreso continuo en esfuerzos globales de vacunación y cumplimiento público con el uso de herramientas como mascarillas y el distanciamiento será un factor importante para determinar el impacto económico de la nueva variante», comentó.

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Foto: El Financiero