La niña coreana conocida como Jinmiran inunda las redes sociales ya que se ha convertido en la reina de los stickers y memes.

Desde su nacimiento hace 4 años, la infante se ha caracterizado por sus curiosos gestos y expresiones que su madre decidió retratar sin saber la fama que obtendría.

Ahora Rohee, su verdadero nombre y su hermana Romi son influencers no solo en Corea del Sur, sino en todo el mundo y la explotación de su imagen presenta un problema.

En el perfil oficial de Jinmiran, manejado por su mamá, pide que no se copie ni distribuya ninguna fotografía y video sin autorización.

Sin embargo, miles de usuarios comparten las imágenes, crean memes y videos sobre las pequeñas coreanas, lo que conflictúa los contratos con diferentes marcas que tiene la familia.

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A pesar de la petición la madre de Jinmiran no ha privatizado la cuenta oficial, aunque si dispone de correos electrónicos para la cotización de campañas.

Las opiniones contradictorias de la tutora de ambas nenas ha sido criticada, señalada como explotación infantil.

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