El dirigente estatal del PRI, Omar Bazán, reconoció que el Partido pagó y muy caro por los errores de quienes traicionaron nuestros ideales pero sobre todo la confianza que los chihuahuenses depositamos en ellos.

El también diputado local, llamó a la militancia y simpatizantes priistas a continuar de pié, unidos y con dignidad en la lucha para recuperar la confianza ciudadana.

Con legítima razón, dijo, la sociedad nos cobró en dos elecciones los excesos de algunos y deberán responder por ello ante los tribunales en el marco de un debido proceso.

El PRI, señaló Omar Bazán, no es sinónimo de corrupción, es una gran institución que sigue trabajando por México.

En el hoy, los priistas seguimos trabajando duro, con optimismo y con la frente en alto, sostuvo Omar Bazán.

Después de las dolorosas derrotas electorales de 2016 y 2018, el Partido entró en una etapa de reconstrucción donde se midieron lealtades y el compromiso de miles de chihuahuenses con esta gran institución.

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La etapa de los lamentos quedó atrás y hoy nos preparamos con dignidad para recuperar los espacios perdidos, sostuvo también.

En el hoy, apuntó Bazán Flores, nuestros alcaldes, diputados, síndicos y regidores dan todos los días lo mejor de sí para servir a los chihuahuenses.

En el hoy, nos preparamos para ganar en las próximas elecciones con una plataforma política con visión de futuro porque «tenemos proyecto y grandes cuadros».

No olvidemos que Chihuahua vive el peor estancamiento de su historia por culpa de una administración estatal que no supo enfrentar los desafíos, incapaz de resolver ni las más básicas demandas de los chihuahuenses.

Por otro lado, apuntó Omar Bazán, un gobierno federal que polariza al país todos los días y que olvidó a Chihuahua tras un brutal recorte de programas que por décadas fueron exitosos.