El problema de los incendios forestales es grave. Además de los árboles y hojarasca que consume el fuego, se lleva el poco pasto que hay, dejando sin alimento al ganado. El escenario se complica si se toma en cuenta que también se secan los pocos ojos de agua que quedan y los manantiales, señaló, el diputado Bernabé Aguilar Carrillo.
Estamos atravesando un momento complicado y, sobre todo, porque la sequía persiste. Por ello, hacemos un llamado a la población para que nos ayude a prevenir los incendios y no caer en descuidos que acaben provocando un siniestro.
Los incendios nos han afectado en Mezquital y Pueblo Nuevo, entre otros municipios. En la mayoría de los casos el problema se desata por descuidos de las personas que visitan las zonas, ya que simplemente una colilla de cigarro que sea lanzada sin apagarla, puede desatar un gran problema.
En otras partes también se ha observado que hay trabajadores que prenden fuego para calentar el “lonche” y no apagan correctamente la fogata.
Bernabé Aguilar puntualizó que los incendios son catastróficos porque se pierden muchos árboles y pasto; pero también se seca la poca agua que hay. “De por sí estamos batallando con la sequía y con los incendios batallaremos mucho más”.
Finalmente, señaló que, afortunadamente, los incendios que se han presentado no han puesto en riesgo la vida de los comuneros.
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Por: Brenda Maurer
