El juez Primero de Distrito en Michoacán, Sergio Santamaría Chamú, es un juez vendido a los intereses de la oligarquía y de la derecha nacional, acusó el Senador Gonzalo Yáñez (PT), durante su participación en la sesión de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión.
A inicios de semana, el juez Santamaría Chamú emitió una suspensión definitiva en un juicio de amparo y ordenó a los Comités de Evaluación de los tres Poderes de la Federación frenar el proceso de elección de jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
La presidenta Claudia Sheinbaum consideró que esta suspensión es improcedente porque contraviene abiertamente la resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que determinó la inviabilidad de los amparos en este proceso, por tratarse del ámbito comicial.
El senador Gonzalo Yáñez señaló que grandeza de la reforma judicial mexicana y su gran trascendencia es que por primera ocasión en la historia de nuestro país se van a elegir de manera popular y directa las personas juzgadoras; un acto de democracia que también por primera sucede en el mundo.
Hablamos no sólo de una reforma judicial, en su auténtico y profundo sentido es una revolución judicial de la misma magnitud que cuando la humanidad se decidió a elegir por vez primera los poderes ejecutivos y los poderes legislativos.
La profunda causa de esta decisión en México es porque el actual poder judicial es un corrupto, salvo algunas excepciones, la mayoría de las personas juzgadoras son personas vendidas, corrompidas.
«¿O qué es este juez primero de distrito en el Estado de Michoacán, Sergio Santamaría Chamu, sino un juez vendido a los intereses de la oligarquía y de la derecha nacional que no solamente se antepone a la reforma judicial? Porque en este momento lo que estamos hablando es ya de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; lo que hace este juez es violar, atropellar, pisotear la constitución de nuestra nación», sentenció.
Gonzalo Yáñez anunció al pueblo de México que como es la convicción de la cuarta transformación de la república, en México manda y mandará el pueblo; habrá elección popular directa de juezas, de jueces, de magistradas, de magistrados, de ministras, de ministros; e hizo un llamado en sobre todo fijarnos en el perfil ético y moral de quienes ocuparán los sitios del próximo Poder Judicial.
«Lo que pide y reclama nuestro pueblo es justicia, justicia y más justicia; y eso lo sólo se logra con personas imparciales, con personas honestas, honradas, que sólo tengan como amo al pueblo y a la Constitución; preparados para servir al pueblo, no preparados para servir a la oligarquía; preparados para servir a la honestidad, no para servir a la corrupción. Va a haber, y lo verán los ojos de la nación, en nuestro país nuevo poder judicial», concluyó.
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Por: Antonio Gaytán
