En el tema de la reforma a la Ley de Amparo, si hay una situación que debe preocuparnos y ocuparnos a toda la sociedad, porque con esto buscan reformar dos artículos de esta Ley para disminuir las facultades de los organismos jurisdiccionales federales para las medidas cautelares, es decir, para solicitar la suspensión provisional de un acto; lo cual es una regresión a los Derechos Humanos, expuso Karla Obregón Avelar.
La presidenta de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), explicó que el juicio de amparo es el mecanismo de control constitucional o el mecanismo que la sociedad mexica tuvimos por primera ocasión para poder proteger nuestros Derechos Humanos; así que, es de gran valor. Sin duda, esta reforma es un gran retroceso en esta materia.
Con las modificaciones a los artículos, las personas vulnerables quedan en una mayor vulnerabilidad, porque el juicio de amparo tiene la suplencia de la queja, que es un mecanismo rápido; mismo que la sociedad conoce más y la verdad es que ha dado resultados extraordinarios.
Dentro de los resultados positivos podemos decir que, incluso, cuando en México se permitía la pena de muerte, de manera muy oportuna los jueces ordenaron la suspensión de este acto, hasta que la persona llevara el debido proceso y se le respetaran todas sus garantías para determinar su responsabilidad.
Abundó en que la Ley de Amparo ha sido protectora de los Derechos Humanos, como el derecho a la vida y la integridad a las personas, “por todo esto, la Reforma sí es un retroceso importante en el caso del sistema jurídico mexicano”.
Finalmente, comentó que se espera que, mediante una Acción de Inconstitucionalidad, esta Reforma no avance; «lo que los mexicanos queremos es contar con un mecanismo para defendernos de las violaciones a los derechos».
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Por: Brenda Maurer
