La gran parte de las viviendas, edificios y todo tipo de construcciones, de Durango y de México no cuentan con las especificaciones necesarias para permitir la ventilación correcta que ayuda a evitar enfermedades y son los arquitectos quienes tienen en sus manos cambiar esta problemática, explicó el arquitecto José-Luis Cortés Delgado, presidente de la Unión Internacional de Arquitectos (UIA), quién explicó que prueba de esto fue la propagación del Covid-19 donde familias completas se contagiaron.
“Hay muchas maneras en que los arquitectos pueden colaborar, primero que nada, en la concepción de las futuras edificaciones; en la selección de los materiales de construcción, hay que analizar la huella ecológica de cada material de construcción, su materia prima, cómo se obtiene y en ese sentido podemos diseñar de mejor manera”, explicó.
“Yo creo que el futuro de la construcción de vivienda de edificios, de todas las grandes obras tenemos que ser muy pensadas, ya no podemos seguir diseñando de la misma manera que en el pasado, tenemos que reconvertirnos, tenemos que tener otra visión”, agregó el arquitecto.
Dicho lo anterior, refirió que la pandemia de COVID-19 dejó este tema de aprendizaje para el gremio, pues incluso los llamados “edificios inteligentes” causaron muchísimos contagios ya que cuentan con sistemas de “purificación de aire” pero no tuvieron la capacidad de suficiente para desinfectar este aire que dispersaban por el edificio y sin duda los arquitectos tienen en sus manos el diseño correcto de la vivienda, lo que ayudaría a evitar estos problemas.
Cortés Delgado, ejemplificó en el tema de la gran mayoría de las viviendas de los Mexicanos, pues señaló que los hogares no tiene ni siquiera la ventilación idónea para evitar contagios de una simple gripa o de problemas más delicados como fue el Covid-19, razón por la cual se presentaron tantos contagios y de familias completas y que muchos hogares ni siquiera contaban con los servicios básicos para mantener la higiene durante el confinamiento.
Finalmente, subrayó que sin duda los arquitectos y desarrolladores de viviendas tienen una gran responsabilidad en sus manos y deben pensar en el bienestar de las familias más allá de solo ofrecerles un techo donde vivir.
Por: Harimm García
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