Durante la noche del martes, las llamas convirtieron en cenizas parte de una fábrica de molduras de madera.

Donde las llamas convirtieron en cenizas una aparte de la fábrica, es en la ciudad de Durango.

La fábrica se ubica sobre el camino a la Ciudad de los Niños, entre Iztapalapa y Azcapotzalco, del fraccionamiento Tenochtitlán.

Eran aproximadamente las 21:30 horas, cuando se reportó el incendio y minutos más tarde arribó el personal de la Dirección Municipal de Protección Civil (DMPC).

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La tarea la encabezó personalmente el titular de la institución, Gustavo Paredes Moreno, el que dirigió las maniobras de sus 35 bomberos.

En esos momentos, las llamas se podían observar desde largas distancias y los bomberos comenzaron a atacarlas.

Luego de cuatro horas de intenso trabajo, con el apoyo de la Dirección Municipal de Servicios Públicos (DMSP) y retroexcavadoras, lograron controlar la situación.

Máquinas y la estructura resultaron seriamente dañadas, pero lo más graves es que se quemaron aproximadamente 70 mil pies de madera.

De momento se desconoce la causa que provocó el incendio, pero se investiga para conocer la realidad.

No se descarta la posibilidad de que se trate de un corto circuito en la instalación eléctrica, o que accidentalmente alguien lanzara la colilla de un cigarro, tal como suele suceder.

Sea lo que fuere, el siniestro provocó pérdidas materiales por cientos de miles de pesos y afectó la fuente de trabajo para varias personas.

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