Un par de individuos roban y empeñan las pantallas que llevan para su reparación, para lo cual cuentan con la complicidad de policías.

Donde roban y empeñan las pantallas que les llevan para su reparación, es en la ciudad de Durango, según denunció  una de las afectadas.

En este jugoso negocio, el par de  individuos también  cuentan con la complicidad de las casas de empeño, que sin comprobar la legal adquisición, les presta dinero y luego las vende.

Esta es la historia que nos cuenta la señora Sonia Elizabeth, vecina del poblado 5 de Mayo, Durango:

Durante el mes de octubre del año anterior, al sufrir un desperfecto su pantalla de 75 pulgadas, buscó alguien que se la reparara.

El día 21 contactó por medio del Facebook  a un taller  en el bulevar Durango y calle Ocampo, del barrio Tierra Blanca, propiedad de Osiel «N» y Miguel «N»

A ella la atendió Osiel, a quien le expuso que deseaba que le reparara su pantalla en su casa, pero le respondió que no podía.

Como pretexto le puso que como se requería herramienta y aparatos para realizar el arreglo, le era imposible andar dado vueltas si algo le faltaba.

Lo ideal, le mencionó, es recoger la pantalla, llevarla al taller, repararla y regresársela, así es que convenció a la señora y quedaron de verse en su domicilio.

El tipo llegó a la casa del 5 de Mayo, revisó la pantalla, le dijo lo qué tenía mal y quedaron en que el costo de la reparación sería de dos mil pesos.

Es así como Osiel recibió el aparato y los dos mil pesos de manos de Sonia Elizabeth, a quien le dijo que en tres días se la regresaría ya reparada.

Inicia el calvario

Cumplido el plazo,  no le llevó la pantalla, por lo que otro día le escribió por el mismo facebook, como no le respondía, le llamó a su número de celular.

La respuesta fue la misma, no le respondió y lo buscó varias veces, hasta que por fin lo localizó y se disculpó por no entregarla a tiempo, pero manifestó que se requería una pieza que no la podía conseguir.

Miguel, el técnico, al abrir la pantalla le rompió una pieza y no la hemos podido conseguir, dijo Osiel a la mujer.

Pasó el tiempo y con uno y mil pretextos, Osiel no la entregó, a pesar de que la cliente le decía que se la regresara aunque  fuera descompuesta.

La denuncia

Desesperada  por no recuperar su pantalla, la señora Sonia, decidió presentar la denuncia en la Fiscalía General del Estado (FGE).

Al investigar el caso los elementos de la Policía Investigadora de Delios (PID), lograron detener a Miguel, técnico o socio de Osiel.

El trabajo realizado por los agentes, descubrió que este individuo empeñó la pantalla y hasta lograron recuperar la boleta de «El Prestamito».

También quedó al descubirto que no era la única pantalla que empeñó, sino varias, de las que la mamá del detenido entregó las respectivas boletas.

La boleta de su pantalla se la mostraron a la agraviada y cuando se la solicitó para recuperarla al pagar el monto que prestaron, los investigadores le informaron que «El Prestamito» la vendió.

Como la señora no está dispuesta a perder su pantalla, acudió con la Agente del Ministerio Público para exigir una explicación, pero le respondió que los agentes de la PID no le informaron nada.

Luego se comunicó con la agente Monserrat, pero ella la  dijo que acudiera ante la ministerio público, y así se echan la bolita uno al otro.

Habla con Osiel, el que se llevó la pantalla

Con el propósito de llegar a un arreglo con Osiel, quien fue el que recogió de su casa la pantalla y éste le prometió que le pagaría poco a poco el importe de su tele.

Incluso le comentó que hablaría con su novia para pedirle que sacara a crédito una pantalla similar para entregársela, porque él estaba en buró de crédito, pero no cumplió.

Sale a relucir la corrupción

La conversación  entre Osiel y Sonia siempre se dio por medio del Facebook o Whatsapp, incluso, hay un menaje en el que le comenta que le entregó cinco mil pesos y cinco pares de tenis a los PIDs.

Esta «gratificación» fue para que dejaran libre a Miguel y hacer aparecer el robo como un abuso de confianza, para que la sanción fuera menor.

Tanto  Osiel como Miguel, en sus cuentas de facebook utilizan  nombres de mujer, como Cecy Castillo, Sandra Celulares,  así como Pantalla Pioneer, entre otros.

Otra particularidad de esta pareja, es que de octubre a diciembre del año pasado, cambiaron de domicilio su taller, sin avisar a los clientes.

Primero estaba en calle Ocampo y bulevar Durango y después a calle Uxmal y bulevar Dolores del Río, de la colonia Azcapotzalco.

La «matriz» del negocio redondo que ellos manejaban, se ubica en calle 5 de Febrero, como a dos cuadras de la Cruz Roja, indica la afectada.

Por último, la señora Sonia, pide al Fiscal General Daniel Rocha Romo, su intervención para que se solucione su caso y recupere la pantalla.

También le pregunta: ¿es legal que en las casas de empeño tomen aparatos sin factura? ¿es legal que las casas de empeño vendan los aparatos sin factura?.

Esto, porque los documentos que comprueban la legal adquisición de la pantalla, están en manos de su legítima propietaria.

Hace como tres años, la FGE y las casas de empeñó firmaron un convenio de colaboración, para evitar el empeño de  objetos robados, pero con este caso, queda claro que no cumplen.

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