A poco más de tres meses de que sale del penal, encuentran el  cadáver en el río,  de un hombre  con historial delictivo.

Quien sale del penal  y encuentran su  cuerpo sin vida,  estuvo preso por delitos contra la salud, según se supo.

Se trata de Agustín Martínez Murrieta, de 42 años de edad, quien tuviera su  domicilio el ejido Sapiorís, municipio de Lerdo, Durango.

Antecedentes

Aproximadamente a las 15:00 horas del día cuatro de enero, un  pescador se encontraba en el Río Nazas, entre los ejidos Sapiorís y El Ranchito.

En un momento dado, sufrió serio sobresalto al ver flotar el en el agua el cadáver de un un hombre, ante lo que dio aviso a las autoridades.

Al cuerpo lo trasladó el Agente del Ministerio Público al anfiteatro e la Vicefiscalía de la Laguna, para que se le practicara la autopsia de ley.

Anorexia por sumersión,  fue el resultado de la diligencia, que en otras palabras quiere decir que murió ahogado.

Sobre este caso surge diversa información que deja entrever que antes de morir, el hoy finado tuvo problemas con la justicia.

Se sabe que  en el año 2015, estuvo preso en La Paz, Baja California Sur, por el delito de robo, y en el Cereso de Durango también purgó una condena.

Por delitos contra la salud,  lo ingresaron  al Centro de Reinserción Social (Cereso) número uno, el tres de abril de  2020, pero recobró su libertad el  21 de septiembre de 2021.

Aunque por sus antecedentes se pusiera creer que  fue asesinado, y aventado al agua, lo cierto es que el cuerpo no presenta huellas de violencia.

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