Análisis de altura… Del “PRI es su Padre” al Juego de Alito… La Dualidad de Arturo Yáñez
16/12/2024 - Hace 1 mes en Durango EstadoAnálisis de altura… Del “PRI es su Padre” al Juego de Alito… La Dualidad de Arturo Yáñez
Por: Eduardo Ortega Solano
La semana pasada, el legislador duranguense Arturo Yáñez nos hizo recordar una coloquial expresión que muchos utilizamos en nuestros años mozos: “Les guste o no les guste, les cuadre o no les cuadre… ¡será su padre!”. Y es que, desde la tribuna de la Cámara Baja, el diputado dijo sin el menor empacho y con dedicatoria a la bancada morenista: El PRI es su padre”. Dicha expresión distó mucho de ser solo una bravuconada, pues el duranguense hacía referencia al origen partidista de los hoy diputados guindas. Claramente expresó: “Muchos de ustedes son egresados de la academia política del PRI. No se puede olvidar que de la corriente democratizadora del tricolor surgieron los grandes liderazgos que, a la postre, dieron vida a Morena: Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo, Ifigenia Martínez, Andrés Manuel López Obrador, entre muchos más. Y qué decir de las cuatro corcholatas aspirantes de Morena a la presidencia de la República: Marcelo Ebrard, Adán Augusto López, Ricardo Monreal y Claudia Sheinbaum. Solo la actual presidenta carece de militancia en el tricolor”.
Bastaría con observar los 32 congresos locales para darnos cuenta de que la mayoría de los legisladores de Morena tienen sus orígenes en el Revolucionario Institucional. El PRI es un partido capaz de formar cuadros, incluso para su oposición. En su momento, por lo menos la mitad de los gobernadores que tuvo el Partido Acción Nacional (PAN) tuvo su origen en el tricolor. Precisamente de ahí surgió la frase: Ppara ganarle al PRI, se necesita un expriista”. Ejemplos sobran: Rafael Moreno Valle, Mario López Valdez (Malova), Carlos Joaquín González, Francisco García Cabeza de Vaca, José Rosas Aispuro, entre muchos más.
Aispuro Torres fue miembro de la “Alianza Federalista”, una escisión de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) que surgió como oposición al expresidente López Obrador. Sin embargo, al final se reveló que el objetivo real de este ente era protegerse, ya que la mayoría de los mandatarios dejaba cuentas pendientes en sus respectivas administraciones. De manera recurrente, el panista aseguraba que AMLO no quería a Durango y, de esta forma, justificaba de manera falaz la falta de recursos para nuestra entidad federativa. Sin embargo, quedó en evidencia que la Federación enviaba el dinero a Durango en tiempo y forma; solo que estos recursos eran aplicados de manera diferente a como estaban etiquetados (por cierto, nadie sabe cómo). Esto se evidenció en el Municipio de Durango, al cual el Gobierno estatal le escamoteó 510 millones de pesos, según informó el entonces alcalde, Jorge Salum.
A pesar de la actitud beligerante de Rosas Aispuro, los recursos para Durango no solo fluyeron de forma normal, sino que también permitieron echar a andar el Hospital General de Gómez Palacio, equipar los dos pisos faltantes del Hospital 450, realizar el proyecto de Agua Saludable para La Laguna y construir la planta potabilizadora en la capital ya con Esteban como gobernador, entre muchas otras acciones. Sin embargo, Durango ya ha sufrido anteriormente la animadversión de un gobierno federal. Basta recordar el encono con el que Vicente Fox trató a nuestra entidad durante el mandato de Ángel Sergio Guerrero Mier, quien tuvo que iniciar con recursos propios la carretera Durango-Mazatlán, ya que, según Fox, era un proyecto técnicamente inviable.
Esteban Villegas, en su toma de posesión, fue muy claro al decir: “Mi chamba va a ser que el presidente se enamore de Durango” y, sin duda, lo logró. Ahora, con Claudia Sheinbaum, consiguió un viejo anhelo: que la Presa Tunal II se integrara al proyecto hídrico del gobierno federal. Es innegable la buena relación que, en poco tiempo, se ha construido entre ambos mandatarios.
Por eso resulta paradójico y un verdadero dislate la publicación de Arturo Yáñez en su cuenta de X, donde asegura textualmente: “La dirigencia estatal del PRI tiene la obligación de defender a los duranguenses y a los priistas, no de proteger a Morena”. Una afirmación falaz y tendenciosa. El presupuesto asignado a todas las entidades ahora se distribuye de manera distinta, pero, en la sumatoria, a Durango le está yendo mejor el decremento que, asegura, se realizó, es una falsedad. Arturo debe comprender que su curul no se lo debe al impresentable de “Alito” Moreno, sino al voto de los electores y a la confianza que le tuvo el gobernador Esteban. Alito necesita ruido y escándalos para justificar su chamba, pero Arturo no debe permitir que lo utilicen como testaferro o muñeco de ventrílocuo en pleitos ajenos. A muchos nos queda claro que esa publicación fue dictada, porque Arturo da para más. No debe perder el rumbo; debe sumarse a la tripulación de este barco llamado Durango, donde hoy el capitán es Esteban.