Primer debate presidencial
Por: Jorge Ánima
No se tiene que ser un adivino para saber que la candidata presidencial del PRIAN, Xóchitl Gálvez, se subirá con los guantes de box puestos y va a denostar a la administración federal más exitosa que hemos tenido en México, pero le falta técnica, pulcritud, clase, elegancia, es decir, sus ataques serán muy toscos. Por otro lado, Claudia Sheinbaum tendrá que sacarse los embates de una manera ágil como lo ha hecho a lo largo de la campaña y presentará diversas propuestas, las cuales las sustenta con el documento “100 pasos para la Transformación”, que, más que propuestas, es un programa integral de Gobierno y defenderá con datos duros como lo acostumbra. En tercer lugar, Álvarez Máynez tiene la gran oportunidad para subirse al ring y el aparador nacional para demostrar por qué es una oferta electoral a la que se le debe considerar o una gran manera de exhibirse.
Este próximo domingo 7 de abril, a las 8 de la noche, se realizará el primer debate presidencial. A lo largo de la campaña electoral se realizará un segundo ejercicio, pero el 24 abril, y para cerrar con la ronda de debates, el tercero será el 19 de mayo, a tan solo 10 días de que culminen las campañas electorales en el país.
Un debate lo podemos definir o debería de ser un intercambio de ideas, posturas, propuestas, visiones, proyectos bajo una organización previamente establecida.
El primer debate presidencial se realizó en nuestro país fue en 1994, este encuentro de candidatos no era contemplado por la Ley Electoral, pero la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión organizó este primer ejercicio; tras el asesinato de Colosio, se realizó un segundo debate, ya con la participación de Ernesto Zedillo del PRI, Diego Fernández de Cevallos (PAN) Y Cuauhtémoc Cárdenas del PRD.
En el pasado inmediato, está el inolvidable momento en que Andrés Manuel López Obrador en el 2018 llamó “riqui, riquín canallín” a Ricardo Anaya.
Vamos a ver la parcialidad o imparcialidad de los moderadores, en especial de Martín López San Martín, que ha manifestado su desacuerdo con la 4T.
En nuestro país, avanzamos en el contraste de ideas que abonan a la democracia, en donde el ciudadano se da cuenta y puede contrastar ideas. De acuerdo a la revista Forbes, 3 de 4 mexicanos verán el debate del próximo Domingo, además 39.7 por ciento manifestó que sí podría cambiar su decisión, mientras que un 60.3 por ciento no la cambiaría posterior al debate. Veremos qué saldos deja el próximo debate.