Por: Pedro Núñez López
Durante muchos años existieron infinidad de pequeños comerciantes que para subsistir hacían hasta lo imposible por tener lo necesario para poder atender a sus clientes y que estos eran de todas las edades, me refiero a las tienditas de la esquina, mejor conocidas también como misceláneas o también abarroteras.
Éstas eran en su mayoría negocios familiares y que se instalaban en la misma casa de su propietario y ya cuando este crecía lo ampliaba o bien encontraba otro lugar mas grande para seguir atendiendo a su clientela.
Para abastecerse dependía de los proveedores de antaño que cada empresa tenía y los visitaba para surtir y reponer las existencias, con la llegada del tren a Durango en 1892, se amplió la posibilidad de tener mas productos en existencia y así poder ofrecer más y más a sus clientes, independientemente de que los productos de primera necesidad como el pan, la leche, huevos y frijoles se podían encontrar quien les abasteciera aquí mismo en la ciudad o hasta ellos mismos lo producían, con el tiempo fuero surgiendo cada día nuevos productos, nuevas marcas que eran atractivas para la clientela y esto hacia que se abrieran cada día mas y mas negocios así, de tal manera conforme se daba el crecimiento de la población y se abrían mas colonias y fraccionamientos y por lo tanto también más misceláneas, carnicerías, tiendas grandes donde se encontraba lo indispensable para la familia, también resultaba atractivo para los dueños de las mismas pues tenían a los clientes cautivos al fiarles los productos y estos el fin de semana liquidaban lo pendiente o a la quincena según los ingresos de cada familia.
Esto servía como un colchón para esos días y si poder tener efectivo para resurtir la tienda y desde luego tener una ganancia.
Con el tiempo los mismos tienderos tenían que ir surtir su negocio y solo las grandes empresas tenían vendedores, ya que habría de ir por el pan blanco y de dulce a las panaderías a las siete de la mañana para tenerlo listo para el desayuno de los clientes así como también existían y empezaron llegar los refrescos con las sodas de Don Plácido que tuvieron muy buena aceptación con el público mismas que fueron desplazadas por las grandes marcas y lo mismo sucedió con las diferentes marcas de cigarrillos y solo por recordar algunos serían «los del buen tono», faros, delicados, fiesta, baronet, comander, vantage, Raleigh, more rojos y verdes, donhill, salem, malboro, Winston, los alas y muchas más marcas que ya desaparecieron. Luego llegaron también los embutidos y los panes en bolsa que también poco a poco dieron con el gusto del público, llegaron luego los productos enlatados con verdura, frutas, carnes, pescado y muchas cosas más, esto al ser envasados se les transportaba más fácil mente y se pedía por cajas teniendo más surtida la miscelánea luego llegaron las botanas a base de papas y cacahuates entre otras más, también aparecieron el poner los productos en bolsa de plástico para ayudar a los clientes y no llevar sueltos los diferentes productos como lo son las verduras y productos a granel.
Los nombres de las misceláneas se ponían de acuerdo al criterio de cada quien, la idea del dueño o el lugar donde se ubicaba, y para ello, la imaginación salía a relucir en grande con una gran infinidad de ellos, a continuación recordaremos algunas de ellas y su posible ubicación y en algunos los nombres del dueño o familia, sirva esto como un homenaje a toda esa gente trabajadora que a base de sudor y esfuerzo lograron hacer un pequeño capital y alimentaron a su familia además de darle estudio y preparación a los hijos.
Recordamos a la miscelánea «San Antonio» de don Cuco Raygoza, en Apartado y Pino Suárez; «la Marina mercante» de don Camilo Melero en 5 de Febrero y Cuauhtémoc; «El mundo de Colon» de Castañeda Matamoros y Arista; «El madrugador» de don Manuel Fierro, en Matamoros y calle Madrugador del Barrio de Tierra Blanca; Abarrotera «Insurgentes» de los señores De la Rosa en la colonia Insurgentes; «La rielera» en la colonia Benjamín Méndez; «La Morgeña» en la colonia Maderera; la miscelánea «Mí Socorrito» en calle Guadalupe y Felipe Pescador; «El milloncito» en Gómez Palacio y Ayuntamiento; «La pasadita» en Gabino Barreda y calle Guadalupe,
«La Tienda de doña Modesta», en la colonia Morga y la de «Lucio y Sofía» enfrente del arroyo de Morga. También está «Flor de México» 20 de Noviembre y Carlos León de la Peña; «La Fe» de don Pedrito en Pino Suarez y Apartado; «La Perla de Occidente», Aquiles Serdán y Apartado.
«La frontera» Pereira y Juárez; «La Gitanita» de Armando Gómez en Apartado y Aquiles Serdán; «La Céntrica» de Arturo Corral Saucedo; «El Senderito» en la colonia Obrera; «La esperanza» Gabino y Bárcena; «La Salida del Sol» de don Pablo Arreola en Pino Suárez y Voladores; En la colonia hipódromo «La Huasteca» en Inde y Santiago Papasquiaro, también la de don Remedios por Inde en la Hipódromo, «La San Martín» en la colonia Rodríguez; «El ranchito» en la colonia Máximo Gamiz; «Fernández» de doña Teresa la de don Chuy; «La Simpatía» en Gómez Palacio e Independencia; «El Super del Prado» en Libertad y Pino Suárez, ambos de la familia Ocaña; en Pino Suárez y Regato “La Negra”, con Armando Macotela; «La Colmena» de don Manuel Melero en calle Zarco, esquina con calle Elorreaga; «La Primera» Aquiles Serdán esquina con Patoni y contra esquina «La Gitanita»; «La Serranita» de la colonia obrera, «La Tienda de Don Fidel», calle Zarco entre Isauro Venzor y Canelas.
«La salida del sol», Voladores y Pino Suárez; «El Centenario» en Tierra Blanca; «El Bucanero» por Porras entre Pino Suárez y 5 de Febrero; «La negra» en Gómez y Pasteur de mi tío Guadalupe Murillo; «El Mexicano» en Juan E. García y Abasolo; «La Florida» en la calle de Florida e Independencia; «La central» en dolores del Río entre Matamoros y Ruiz; «La de Agapito» en Fresno y Ramírez; «El Porvenir» de Calle Pino Suárez Y Reforma; «La Nueva Era» 5 de Febrero y Regato, donde está ahora un colegio; «El Super Faro» 5 de Febrero, enfrente de la Gasolinera de Núñez y Domínguez; «El Submarino» 5 de Febrero, enfrente del Parquecito Nazas; «La Pastorcita» contra Esquina del Parquecito Nazas, «La Casa García» en la colonia Hipódromo, «La Estrellita del Sur», en la colonia Valle del Sur.
«La Primera», Ramírez y Elorreaga atendida por Sergio Piñeira, «La Roca de Oro» en Gómez Farias y Abasolo, en Tierra Blanca de don Tomás González; «El Rancho Grande», por la explanada de Los Insurgentes; «La Nacional» en la esquina Gómez Palacio y Ayuntamiento; «La Burbujita», Costa y Pereyra de don Zenón; «La Zacatecana», Pereyra y Guadalupe; «El Becerro de Oro», de la colonia Maderera; «Las 2 Maravillas», de independencia y Gabino Barreda; «El Faro», en zaragoza y Gómez Palacio con doña Tina; la miscelánea «Chayito» de don Fidel Segovia, en Zarco y Isauro Venzor; «El coral», Gabino y Madero; «El Brillante», Coronado y Pasteur, «La Única», Isauro Venzor y Voladores; «Las Noches de Luna», Pasteur y Paloma; «La Paloma Azul», Paloma y Patoni; «La Azucena», paloma y Patoni; «La Campana», Gabino y Pasteur; «La 109», Pasteur entre Coronado y Aquiles, «El Marfil», 5 de Febrero y Nogal; de Don Chuy, «Las Quince Letras», por Luna y Juan E. García Lupe Raigosa; «La Morenita», Gómez Palacio y Pasteur; «El Porvenir», en Negrete y Voladores; «El Trasval», barrio del Calvario, de los Miranda; miscelánea «La Española», en Hernández y Zaragoza de doña Sara Galindo estuvo muchísimos años; «La Palestina», años 50, en 5 de Febrero y Carlos León de la Peña; «La Providencia», en Ramírez y Fresno con Agapito Retana; «La Miniatura», Pasteur antes de llegar a Paloma; «La Yuca» de Don Samuel Pereyra y Zarco; «La Primera» de don Panchito, por la calle de Ramírez y Elorreaga; «Rancho Grande La Villita», por rumbo del santuario; «El Tíber», 5 de Febrero y de la Cruz, de Doña Kika; «El Pavo» en Florida y Fénix; «La Salida del Sol», en Blas Corral y Pino Suárez atendida por el señor Arreola; «La Chiripa», en Hidalgo y Felipe Pescador, podríamos pasar mencionando todas y cada una de ellas, ya que son miles y que de alguna manera forman parte de la historia de Durango.
Fuente publicación en el grupo «Durango Antiguo», realizada por Salvador Rafael González Soto, imágenes obtenidas en el grupo «Durango Antiguo».