Por: Raquel Carreón Lugo

Un prospecto del boxeo duranguenses, Manuel de Jesús “Enfermero” Quezada, ya se encuentra en un lugar mejor; el pasado jueves fue llamado para formar parte de la bóveda celeste.

Conocido por muchos cuando subía al cuadrilátero y hacía un boxeo muy técnico, siempre con una humildad tanto fuera como dentro del pugilismo, Manuel de Jesús ahora ya puede tocar los últimos segundos del round, al lado de su abuela, padre y madre.

Con tan solo 29 años de edad, dejó un gran legado, pareja de la boxeadora Nora Cardoza, con quien procreó dos hijos, en varias ocasiones estuvo en funciones prometedoras.

Dedicado a la enfermería, profesión que lo apasionaba, fue tanto el gusto por ayudar a los demás, que dejó a un lado el boxeo para estar dedicado al cien por ciento con el uniforme blanco. Pese a eso siempre estuvo al pendiente de todo lo relacionado al boxeo tanto local, nacional e internacional.

Siempre al pendiente de su familia, sus dos hijos, su profesión de enfermero le dio para el sustento, es por eso que el boxeo lo dejó en stand by.

Fiel al gimnasio donde entrenaba, José de Jesús Burciaga “Curita de Boxeo”, así como de su alma máter, la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED), ahora ya puede lanzar un gancho al hígado desde el cielo, en paz descanse.

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