Una niña de casi cinco años, que ha vivido en la Casa Hogar, del DIF estatal Durango, podría viajar a Canadá, a su nuevo hogar, ya que está por concretarse una adopción internacional.

José Luis Herrera, procurador de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, en dicha localidad, informó que ya se realizó el primer periodo de convivencia y  «fue muy exitoso así que esperamos que ya en breve se pueda dar en adopción».

Esta adopción ha cobrado gran valor debido a la historia que precede a la conformación de la nueva familia.

«La niña llegó con nosotros aproximadamente a los 20 días de vida, pero básicamente desde que ella nació estuvo hospitalizada», relató el procurador. Como actualmente sucede en la mayoría de los casos de niños que son retirados de sus progenitores e institucionalizados, ella nació de una madre con problemas de adicción a drogas.

El entrevistado narró que «la mamá llegó todavía bajo el influjo de la droga conocida como cristal y había manifestado que unas horas antes de ingresar al hospital había consumido». Personal médico del hospital donde nació reportó el hecho al DIF estatal, y al revisarla fue diagnosticada como paciente VIH positivo.

Por dicho padecimiento, la madre falleció al poco tiempo, por lo que quedó bajo la tutela del Estado, y desde entonces le han buscado un hogar.

Pero el procurador admitió que, «por el diagnostico de su enfermedad y el desconocimiento, también hay que decirlo, de muchas familias, no había podido ser posible asignarla en una adopción».

El estigma que prevalece respecto al VIH en nuestro país ha evitado que la niña encuentre un hogar aquí, por lo que personal del DIF estatal, buscó otra posibilidad.

«Los matrimonios que son fuera del país únicamente pueden adoptar niños mayores de seis años o que tengan alguna condición especial», explicó el entrevistado. No obstante, «Paulet si bien es cierto es menor de cinco años, la enfermedad que ella tiene, el diagnostico que le ha impedido formar parte de una familia aquí en México, le da ahorita la oportunidad de acceder a una adopción internacional», destacó.

Este tipo de adopciones se rigen por el Convenio de La Haya, del 29 de mayo de 1993.

El procurador informó que «en ésta adopción interviene una agencia particular y por parte de México interviene Relaciones Exteriores y el DIF nacional, son las autoridades que nos regirán en este procedimiento».

Lograr una adopción no es un procedimiento sencillo, y una de las limitantes es la edad que los padres desean.

De acuerdo con información de la Procuraduría, todos buscan niños menores de tres años, pero actualmente la lista de niñas, niños y adolescentes que pueden ser adoptados son alrededor de 20.

«Pero todos son grupos de hermanos, o son mayores de ocho años, o tienen alguna condición médica especial», dijo.

Es el caso de Paulet, quien como otros niños de Casa Hogar del DIF estatal está a punto de viajar al extranjero para encontrarse con sus nuevos papás.

En los últimos cinco años, en Durango se han realizado un par de adopciones internacionales, ésta sería la tercera.

El procurador destacó que los últimos casos fueron dos grupos de hermanos, todos mayores de nueve años y «algunos tenían una condición especial».