Con mesas, sillas, sonidos, arreglos florales y camiones, se manifestaron esta mañana los agremiados a la Asociación de Profesionales de Eventos; ellos exigen la inmediata reactivación de los eventos sociales, ya que la situación que enfrentan es muy grave, reportando así una pérdida de más de 400 millones de pesos.
En este sentido, Ernesto Serrano Mejorado, uno de los integrantes y vocero oficial de la Asociación, indicó que, son más de ocho meses los que se han mantenido sin trabajo; manifestó que, los ahorros que en su momento se llegaron a tener, ya han desaparecido.
Y puntualizó que, alrededor de cuatro mil familias se están viendo afectadas por la suspensión de los eventos sociales; lo que representa una pérdida económica de alrededor de 450 millones de pesos; “prácticamente somos el único sector que se encuentra detenido; vemos filas en centros multipago y otros lugares, en donde no se cumple con las medidas de sanidad y ahí no dicen nada”, comentó.
Así, detalló que, desde el mes de junio, ellos fueron certificaciones y capacitaciones por parte de la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del estado de Durango (Coprised), con el objetivo de garantizar la seguridad de la ciudadanía; además de evitar que sea un foco rojo de infección.
“Nosotros sabemos los protocolos que deben de llevar tanto para los que acuden a los eventos, como también para nuestros trabajadores, además respetaremos el aforo que se nos indique”, manifestó.
Al ser cuestionado sobre algunos salones de eventos que se encuentran en la periferia, Ernesto Serrano fue contundente al decir que no hay piso parejo.
“Vemos que hay restaurantes que han fungido como salones de eventos, ya que nosotros no podemos trabajar y eso la autoridad no lo sanciona; además, los que están a las afueras vemos que han tenido hasta 400 personas y sin ningún protocolo”, recalcó.
Por último, los poco más de 200 manifestantes, aseguraron que, no se moverían del lugar hasta que las autoridades les den una respuesta; recalcando que ya no pueden aguantar más tiempo de esta manera.
“Tenemos trabajadores que ya no tienen ni un peso, nos reunimos y los apoyamos con despensas, pero ya tampoco tenemos liquidez”, concluyeron.
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