En la clínica de Salud Mental se le brinda atención psicológica a niños a partir de los siete años y hasta la edad adulta, hasta el momento no se ha atendido a algún niño y que presente el consumo de sustancias, de esta manera lo aseguró Omar de la Cruz Loera, Jefe de Departamento para la Prevención y Asistencia de las Adicciones y Violencia en la Dirección de Salud Mental del INDEHVAL.
“Los casos que se han podido detectar van de la adolescencia hacia edades más elevadas, la sustancia con mayor consumo por los adolescentes es la marihuana y seguramente es por su facilidad para adquirirla y por ser lo que más referencia tiene en los medios masivos de comunicación; sin embargo, la de mayor impacto es el cristal”.
Omar de la Cruz Loera dijo que se han dado cuenta en que el consumo de sustancias se genera porque las personas tienen algún tipo de problema y el consumir les ayuda no a enfrentar, pero sí a evadir y minimizar la problemática que tienen de manera constante.
Esto termina impactando en las relaciones sociales, laborales, matrimoniales y se va generando el efecto bola de nieve y cuando buscan la ayuda es porque ya tienen un problema muy crónico.
“Me atrevería a decir que estamos en un 60-40, el 60 es la población que sí maneja bien sus emociones y el 40 estamos hablando del primer consumo de sustancias sin que realmente sea una problemática, pero este porcentaje de la población podría tener relación con algún consumo de sustancias sin que sea este número la población crónica” señaló.
El caso de recuperación es multifactorial y depende mucho de la voluntad que tenga la persona, las redes de apoyo con las que cuente, técnicas y herramientas que se les facilite durante su tratamiento, pero el pronóstico es alentador.
Un buen programa y buen acompañamiento, una decisión de la persona para dejar de consumir garantiza mucho éxito en la recuperación, se podría decir que un 80 por ciento de pacientes lo logran.
Por: Víctor Salas