-El marchista español Jesús Ángel García se convirtió en el atleta con más participaciones olímpicas en la historia.
La marcha es uno de los deportes por excelencia más demandantes presentes en los Juegos Olímpicos; por las largas distancias que recorren los atletas y el desgaste físico y mental al que se someten, son pocas las personas que se aventuran a esta disciplina.
Uno de los máximos exponentes de la marcha es Jesús Ángel García, el español tiene 51 años y participó en los Jugos Olímpicos de Tokio 2020 este verano; la hazaña del marchista es que esta es su octava participación en la máxima justa veraniega; convirtiéndose así en el hombre con más apariciones olímpicas en la historia.
«Mi intención era llegar a la última competición de 50 km marcha que se realizaran en unos Olímpicos», declaró hace tiempo y lo cumplió.
La historia comenzó en casa
Su primera aparición en la competencia fue en Barcelona 1992, con a penas 22 años defendió por primera vez los colores de su país en la marcha con un dignísimo 10mo puesto. Su revancha vendría para 1996, en Atlanta donde lamentablemente para su causa terminaría retirándose de la competencia.
Para Sydney 2000 llegaba ya con más experiencia, pero solo le alcanzaría para llevarse un 12vo puesto, uno de sus mejores resultados fue en el ciclo olímpico que culminó en el verano de 2004 en Atenas, rozando el podio con un 5to lugar en su especialidad, los 50 kilómetros de marcha atlética.
Para Beijing 2008 llegaba como figura y logró el 4to lugar para él y para su país a la vista del olimpo aunque un escalón por debajo del podio; en Londres 2012 ya estaba decayendo (naturalmente) pero culminó la competencia en el lugar 17.
Después, en Río de Janeiro 2016 terminó el el 20vo puesto, pero ya con una historia de éxitos a cuestas.
Termina su historia olímpica junto con la competencia
Se anunció que la competencia de los 50 kilómetros de marcha vería su final en la edición olímpica de Tokio y Jesús quería estar sí o sí. Así lo cumplió. Terminó en el lugar 35, pero el honor de ser el hombre con más participaciones olímpicas estará con él por mucho tiempo.
Así «Chuso» se despide del olimpismo, pocos con su gloria y nadie con el placer de saber que junto con él, la competencia también termina.