Por: Manuel Díaz 

“Decidí pasar toda la vida con mi esposa, ahora decido morir para ir al cielo con ella”, fueron las últimas palabras del anciano que decidió no ser intubado para no recuperarse del COVID-19, compartió el enfermero especialista del ISSSTE, David García.

A consecuencia de las fiestas que los hijos realizaban en la casa del matrimonio de ancianos, esta pareja fue contagiada por COVID-19.

Los dos adultos mayores ingresaron al área de hospitalización del ISSSTE, se tuvieron complicaciones propias de la enfermedad, que se conjugaron con la edad.

Fue la esposa la primera en fallecer a consecuencia de la enfermedad; su esposo también estaba grave, pero al enterarse de la muerte de su compañera de vida, optó por no ser intubado.

El personal médico del ISSSTE se comunicó con los familiares para que autorizaran que no se colocara el ventilador al adulto mayor, mismos que aceptaron la última petición del anciano. Se le otorgó calidad de vida en sus últimos alientos.

Gracias por ayudarme para no usar el ventilador, manifestó el anciano y sus últimas palabras fueron: “Decidí pasar toda la vida con mi esposa, ahora decido morir para ir al cielo con ella”.

La experiencia es parte de lo que se vive día a día en el área COVID-19 del ISSSTE, se pide mesura a los jóvenes para cuidar a sus seres queridos.

Te podría interesar: Perdóname papá por errores cometidos; COVID-19 guerra que desintegra familias