Con gran alegría y felicidad, por fin este domingo Toñito conoció el mar en Mazatlán junto a su padre Marco Antonio Torres, acompañados de Toño Ochoa quien hizo realidad este gran sueño, en el marco del Día del Padre.
Entre la arena y las olas del mar en el puerto de Mazatlán, el papá de Toñito agradeció infinitamente a Toño Ochoa por hacer realidad este gran anhelo que por momentos casi se volvía inalcanzable, tras sufrir el robo de sus ahorros para este viaje.
“En Durango, los sueños se cumplen y se escriben historias distintas llenas de esperanza, porque un duranguense nunca deja solo a otro duranguense”, aseguró Toño Ochoa.
Además de ser testigo de esta experiencia de ensueño de su tocayo, Toño Ochoa llevó a cabo una gira de trabajo y promoción turística de Durango capital con varios funcionarios de este sector en el puerto del Pacífico.
Lo que parecía una historia de abandono y sufrimiento, hoy es una más de sueños cumplidos, primero con una vivienda digna para vivir, ahora con un viaje para conocer el mar, así Toñito y su papá celebraron el Día del Padre y, por si fuera poco, el cumpleaños del señor Marco Antonio.