Cerca de 500 mordeduras de perro ha atendido el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en el estado de Durango, de 2022 a la fecha; cuando un animal ataca y hay lesiones, se recomienda acudir al médico para evitar complicaciones.
La directora de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 44, doctora Martha Irene De la Garza, recomendó que lo primero es lavar bien la herida con agua y jabón.
De 2022 a la fecha, el IMSS ha registrado más de 460 consultas por mordedura canina en la entidad duranguense: en el año 2022 se brindaron aproximadamente 150 consultas, en el año 2023 fueron más de 200 y en lo que va del año 2024 se han brindado más de cien atenciones.
Dependiendo de la raza del perro, las mordeduras pueden causar, básicamente, tres tipos de lesiones: perforación, dilaceración o aplastamiento.
Las complicaciones más frecuentes de mordeduras de perro son la infección bacteriana de la herida o la lesión de la piel, los músculos, vasos sanguíneos, nervios y de los tendones, sobre todo cuando la mordedura es causada por perros grandes.
Ante cualquier mordedura de animal, se debe acudir con su médico familiar para valorar la condición de la herida, el riesgo de infección y brindar tratamiento si así lo requiera.
En caso de presentar mordedura o agresión por animal silvestre (zorro, zorrillo, mapache, murciélago, lobo, coyote), acudir de manera urgente a su unidad médica más cercana.
Para estos casos lo mejor es no automedicarse, ya que se requiere de valoración médica.
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Por: Antonio Gaytán