Ya ha pasado más de un año de pandemia, tiempo en el que se ha visto un incremento progresivo de negocios cerrados.

Si bien hubo una mejora con el semáforo verde que se había presentado en los últimos meses, con la tercera ola de COVID-19, de nuevo los comerciantes temen el desplome de sus negocios, sobre todo porque todavía no se recuperan de la mala situación de 2020.

Martha Valdez, presidenta de la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (Canacope), recordó que el año pasado, «fue pérdida total» para un 80 por ciento de los negocios en la ciudad de Durango.

«Fue muy grave», dijo, y ahora con la tercera ola de COVID-19, «no tenemos esperanza de que esto se reactive».

A nivel nacional, se estima que un millón diez mil 857 comercios tuvieron que cerrar a causa de la pandemia, y de estos 20.81 por ciento ya no pudieron abrir por falta de recursos, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

En el caso de los comercios pequeños locales, todos sufrieron un impacto independiente de su giro.

La representante del sector, refirió que los negocios de ropa, de accesorios para celulares, incluso las misceláneas y establecimientos de comida, sufrieron pérdidas, aunque estos últimos no tuvieron que cerrar.

«Es importante para nosotros que inicien las clases presenciales para que a nosotros nos vaya mejor en las ventas en general», indicó la entrevistada.

No obstante, el regreso presencial a clases para agosto como se tenía pensado depende del comportamiento de la pandemia. Por lo que aún no es definitivo que todo vuelva a la normalidad en las escuelas, con lo que el comercio visualiza una reactivación económica para que no ocurra lo que el año pasado que se perdieron decenas de negocios y por lo tanto de empleos.

La presidenta de Canacope, refirió que en 2020, cerraron cerca de 20 comercios de esta cámara, lo que proyecta una afectación de por lo menos 60 personas desempleadas.

«En el pequeño comercio no se maneja mucha cantidad de empleados, pero aún así fueron familias afectadas», destacó.

En este contexto, los comerciantes esperan el apoyo de Gobierno a través de programas, aunque la entrevistada admitió que solo los que cumplen con todos los requisitos pueden acceder a créditos y estímulos para superar los efectos de la pandemia.

«No todo mundo accede a ellos por falta de requisitos; son los que se les pone a ciertos sectores», afirmó, aunque también aseguró que «siempre se va a contar con créditos».

Por lo general, es el comercio informal para el que es imposible tener este tipo de programas, aunque informales o no, el comercio en pequeño es uno de los que más ha sufrido por la COVID-19.

Ahora con la tercera ola de contagios, prevén un retroceso en la leve recuperación que habían tenido.

«No es nada favorable», lamentó la representante.