Durango a un paso de avanzar a semáforo verde de la pandemia de la COVID-19; sin embargo, la movilidad del reciente fin de semana largo y las próximas vacaciones de Semana Santa pueden provocar un repunte de casos y costarnos un retroceso, reconoció el gobernador José Aispuro.
“La gente va a Mazatlán con mucha más regularidad, las cabañas de la sierra de Durango están abiertas y con una ocupación del 100 por ciento, vamos a analizar esa situación”, señaló.
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La entidad prácticamente está en el límite inferior del semáforo amarillo; es decir, de seguir disminuyendo los nuevos casos de COVID-19, muy pronto se podrá activar el semáforo verde.
Esta mejoría en la calificación sanitaria es porque en los últimos días han bajado los contagios y fallecimientos por esta enfermedad; pero esto no quiere decir que se haya superado la pandemia.
«No debemos perder de vista que la movilidad del fin de semana largo y lo que viene en la próxima Semana Santa, puede traernos consecuencias», puntualizó.
Añadió que existe el riesgo que se dispararen los contagios y en lugar de avanzar, permanezca el semáforo amarillo e incluso retrocedamos a semáforo naranja.
El Consejo estatal de Salud sesionará esta misma semana para encontrar estrategias para sensibilizar y exhortar a la sociedad a seguir cuidándose.
