Durango busca adaptarse al cambio climático con obras para almacenar agua, “nos tardamos en hacerlas”, declaró el gobernador Esteban Villegas Villarreal, en el arranque de la construcción de cientos de bordos a lo largo y ancho del estado.
El cambio climático hace que los patrones de precipitaciones se vuelvan cada vez más impredecibles, obligando a todo el mundo a repensar cómo manejamos el agua dulce.
Se trata del desafío más urgente para la humanidad porque las crisis hídricas ya están causando estragos en las personas, el medio ambiente y las economías.
Esta semana, el gobernador Villegas estuvo en la Comisión Nacional de Zonas Áridas (Conaza) para dar seguimiento al compromiso del secretario de Agricultura, Víctor Villalobos, de bombardear las nubes para estimular las lluvias, “nos dijeron que sí otra vez, yo espero que nos digan cuándo empezamos, yo tengo listo el avión”.
La Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (SAGDR), a cargo de Chuy López, está coordinando la meta de construir 500 bordos de abrevadero en solo dos años de administración estatal, ya se concluyeron más de 200 y actualmente se trabaja en 270. Son de grandes dimensiones para que almacenen una cantidad de agua suficiente para aguantar de dos a tres años de sequía.
El arranque de esta segunda etapa de bordos se realizó en la región de El Nayar, municipio de Durango, donde estuvieron presenten diversos alcaldes: Toño Ochoa, Nancy Vázquez, Mary Amaya y Elizabeth Sotelo, entre otros más.
“Esta infraestructura la estamos haciendo junto con los presidentes municipales, lo vamos a hacer en los 39 municipios; es darle un seguro de vida al ganado, tener agua en tiempos de sequía, el tiempo no tiene palabra, ya llegó el cambio climático y no sabemos cuándo va a llover, hay que aprovechar cuando llueva y almacenar agua”, concluyó.
Por: Antonio Gaytán
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