Por: Antonio Gaytán
Las economías regionales son la solución ante el retorno de la inflación global, opinó el titular de la Secretaria de Desarrollo Económico (Sedeco), Gustavo Kientzle Baille.
El aumento inflacionario se percibe en la mayoría de las economías del mundo, desde países desarrollados, emergentes y naciones en desarrollo.
Las causas de esta inflación varían según los países, pero las más recientes y principales, son la pandemia de COVID-19 y la guerra Ucrania-Rusia.
Ambas impactaron la cadena de suministros, los puertos marítimos están saturados y altera, la parte logística para la transportación de mercancías, un tema muy difícil de controlar.
La pregunta es: ¿funcionará el paquete antiinflacionario que anunció el presidente Andres Manuel Lopez Obrador para contener el aumento de precios, principalmente en alimentos?
Desde el punto de vista del secretario Gustavo Kientzle no es suficiente subsidiar los combustibles y la electricidad, que es el eje central del Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic).
Es necesario que México, al igual que otros países, basen su solución en la cadena de suministros y debemos empezar a hablar de economías regionales, de producir lo que necesitamos.
Hablar de economías regionales para nuestro país es una gran área de oportunidad con el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Podemos producir lo que se necesita en Norteamérica y tenemos dos ejemplos en Durango:
- La planta de microchips para automóviles que se construye en Gómez Palacio
- La fábrica de fertilizantes nitrogenados en Lerdo.
Ambas inversiones millonarias, además de generar empleo, responden a una necesidad que se tiene en la industria automotriz y en la agroindustria.
“Tenemos que ir a la raíz de los problemas, lo que esta golpeado es la cadena de suministros y es donde tenemos que enfocarnos; es una oportunidad de crecer”, concluyó.
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