El gobernador Esteban Villegas entregó a la administración federal el penal de Durango construido durante el sexenio de Enrique Peña Nieto y que nunca se ha usado; transferencia que se dio a conocer en la visita del presidente Andrés Manuel López Obrador.
La construcción del Centro de Reinserción Social (Cereso) representó un gasto de 3 mil millones de pesos y tenía como objetivo reubicar los reos del Cereso número 1 ubicado en la ciudad de Durango.
Se trata de un penal que nunca ha sido usado porque no tiene la capacidad de albergar a todos los presos del Cereso número 1, en consecuencia para el Gobierno del estado de Durango no es viable financieramente porque tendría que quedarse con los dos penales.
La secretaría de Seguridad y Protección Civil, Rosa Isela Rodríguez, informó que se habían concluido con los trámites administrativos para que el penal sea entregado a la Federación.
El centro tiene una capacidad instalada para brindar atención a mil 900 personas; actualmente, en los 14 centros federales existe una población superior a las 20 mil personas. Aunque ninguno de estos espacios federales registra sobrepoblación, contar con un centro adicional nos permitirá seguir atendiendo las solicitudes de todos los estados para apoyar en la gobernabilidad de los estados.
Y decir que, presidente, que ya sumamos 12 mil 330 traslados en su administración a solicitud de los estados. También, decir, subrayar que de esta manera contribuimos a la gobernabilidad de todo el país en la consolidación de un sistema mejor, siempre con respeto pleno a los derechos humanos de las personas internas.
La entrega del nuevo penal de Durango a la administración federal es un paso importante en la mejora del sistema penitenciario del estado y es una muestra de la colaboración entre gobiernos para fortalecer la seguridad en la entidad y en todo México. Se espera que esta acción contribuya a la rehabilitación de los reclusos y fortalezca las acciones para combatir la delincuencia.
Por: Antonio Gaytán
