Por: Brenda Maurer
Si bien la “objeción de conciencia” provocó muchos puntos de vista encontrados en Nuevo León; la realidad es que en Durango su aplicación está muy clara, porque se basa en que a los médicos no se les obligue a hacer cosas de su profesión que vayan en contra de sus principios pero no se trata de discriminar a ningún sector de la población, explicó el presidente de la comisión de Derechos Humanos en el Congreso del Estado, David Ramos Zepeda.
Al discutirse esta situación en el estado de Nuevo León, se generó la percepción de que grupos poblacionales como el de la diversidad sexual, migrantes, indígenas, entre otros; podrían ya no recibir atención médica, sin embargo, cabe aclarar que en Durango nunca se ha planteado que la objeción de conciencia sea con fines discriminatorios. «Puede ser que alguien solicite un aborto lo cual no está permitido en la entidad, pero en ese caso también aplica el que los principios del médico no le permitan realizarlo y por ello puede excusarse de practicarlo”.
El Legislador perredista consideró que se debe ser muy puntual en este tema para informar bien a la ciudadanía “porque también hay la salvedad de que un médico no puede alegar sus principios o la objeción de conciencia cuando esté en riesgo la vida de un paciente; en ese caso debe actuar para salvar a la persona” finalizó.