Por: Antonio Gaytán

La pandemia de COVID-19 dispara un 300 por ciento el trámite de testamentos, informó el presidente del Colegio de Notarios de Durango, Vicente Guerrero, incremento significativo registrado durante los meses de mayo, junio y julio, tomando como referencia el mismo periodo del año pasado.

Este aumento es debido al temor por el nuevo Coronavirus, según lo externado por los propios ciudadanos quienes perciben un riesgo y desean dejar protegidos a sus seres queridos.

El testamento es un documento de poca demanda durante esos meses; en una Notaría durante ese trimestre se elaboraban máximo cuatro escritos, y este año superan los 12 testamentos.

Los notarios cobran tres mil pesos por redactar un testamento, sin embargo, durante septiembre y octubre, que son los meses del testamento, los ciudadanos obtienen un 50 por ciento en el costo.

Es muy importante realizarlo tomando en cuenta las bondades de dejar por escrito nuestra voluntad, elimina pleitos en la repartición de bienes entre los herederos.

Descuentos que han venido aplicándose durante 18 años seguidos y han incentivado la cultura del testamento, disminuyendo los litigios por las herencias.

El testamento es un acto personalísimo, debe atenderse por el notario de manera presencial, es decir, no puede realizarlo un auxiliar, y por lo tanto, solo se realizan máximo tres testamentos por día en cada Notaria, porque deben aclararse dudas y quedar disipada cualquier inquietud en el documento; elaborarlo tarda más de una hora.

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