Por: Juan Carlos Chávez
Es urgente que se atienda el caso de los 50 empleados despedidos de la Secretaría de Bienestar, se hizo sin ningún argumento, su único pecado fue no estar de acuerdo con la forma en la que se entregaban los programas sociales, así lo señaló la diputada panista, María Elena González Rivera.
La Diputada agregó que los trabajadores detectaron que los apoyos se llevaban a personas que no tenían necesidad, o incluían en los programas de personas con discapacidad a gente que no tenía esta condición, algo que se denunció y fue el motivo de su despido.
La legisladora exigió que se realice una auditoría a esta dependencia federal, y que el delegado, Edgar Morales Garfias salga y de la cara ante esta situación, «que atienda a esta gente y que se resuelva este caso, él se comprometió a reinstalar a los trabajadores, lamentablemente fueron engañados y ahora no hay quien los atienda», explicó.
Finalmente denunció que la delegación de Bienestar trabaja en otra sede, al parecer parte del personal está realizando los trámites y operaciones en la escuela secundaria Francisco Villa, hasta este momento la autoridad laboral no ha intervenido en el conflicto, las instalaciones tienen más de 15 días cerradas y al parecer al titular no le interesa que esto llegue a buen término.
