Por: Antonio Gaytán

Secuestrar carbono, una opción más de riqueza en la sierra de Durango; la venta de bonos de carbono es un proyecto a punto de concretarse, anunció el titular de Recursos Naturales y Medio Ambiente (SRNyMA), Alfredo Herrera.

Durango posee nueve millones de hectáreas de territorio forestal, de las cuales cinco millones de hectáreas son de bosque y cerca de un millón de hectáreas están certificadas.

Alfredo Herrera explicó que, en el Acuerdo de París, los países miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se comprometen a reducir las emisiones de dióxido de carbono (C02), el cual es el principal gas de efecto invernadero, causante del cambio climático.

Se tienen dos opciones: reducir la quema de combustibles fósiles, desarrollando energías renovables, y capturar emisiones de CO2, esto se hace mediante empresas de secuestro de carbono.

Grandes compañías, principalmente de países desarrollados, han reducido sus emisiones de gas invernadero, pero no alcanzan un nivel de cero contaminantes, en consecuencia, están obligadas en comprar bonos de carbono para compensar.

Incluso, hay un mercado mundial de captura y secuestro de carbono; hablamos de millones de dólares para quienes se dediquen a esta actividad ambiental.

• De acuerdo con el informe del International Carbon Action Partnership(ICAP), titulado Comercio de Emisiones a nivel Global: Informe ICAP 2022.
• El comercio de emisiones continuará en crecimiento por ser una herramienta clave para lograr la descarbonización necesaria y cumplir, a largo plazo, con las emisiones netas cero.

Los proyectos más redituables son reforestación de captura y almacenamiento de carbono.

La pregunta es ¿cómo entra Durango al mercado de secuestrar carbono?

El secretario de SRNyMA explicó que una certificadora cuenta y mide los árboles de una hectárea de bosque y regresa un año después para remedir su biomasa; con estos datos y una fórmula científica, se estima cuánto carbono fue secuestrado.

«Un ejemplo: Yo tengo una hectárea que me secuestra tres toneladas de carbono y emito un certificado que me lo pagan, según su valor en el mercado; habrá quien pague más”, agregó.

El estado de Durango tiene la posibilidad de certificar predios grandes de bosque y ser una opción más de desarrollo económico para los ejidatarios de la sierra.

La sierra duranguense ofrece diversas opciones productivas: minería, forestal, agricultura, ganadería, ecoturismo y ahora, una más, el secuestro de carbono, actividades que se pueden realizar todas de manera complementaria.

El secretario Alfredo Herrera prevé que en próximas semanas se firmará un acuerdo con certificadoras y ejidatarios, proyecto de gran beneficio para todos, porque se trata de cuidar del bosque para que capture CO2 y genere oxígeno.

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