Por: Antonio Gaytán
Seis mil familias viven en asentamientos irregulares en la ciudad de Durango, según estimaciones de la Comisión Estatal de Suelo y Vivienda (Coesvi).
«Es un grave rezago jurídico patrimonial que creció en los últimos seis años», expresó el director General de la Coesvi, Jaime Fernández Saracho.
Familias que han ante la falta de opciones son enganchados para ocupar lotes irregulares carentes de servicios como agua, drenaje, electricidad y alumbrado público; incluso en muchos de los casos están en zonas consideradas de alto riesgo.
El también llamado mercado informal de la vivienda no respeta indicadores de desarrollo urbano y en consecuencia, quienes habitan en estas colonias también sufren por la falta de transporte público, áreas verdes y escuelas; entre otros servicios.
Con el paso de los años, los servicios van llegando a un costo muy alto y son ineficientes.
Por indicaciones del gobernador Esteban Villegas, con el apoyo del Instituto Nacional del Suelo Sustentable (Insus), ha iniciado una cruzada para dar certeza jurídica a estas familias.
Jaime Fernández reconoce que hay un problema serio en la capital duranguense en indicaciones de pobreza como hacinamiento y carencia de servicios.
Disminuir estos asentamientos irregulares que están en toda la periferia de la ciudad requiere de una estrategia coordinada de los tres niveles de Gobierno.
«Vamos trabajando bien, en seis meses del Gobierno de Esteban llevamos 600 entregas de títulos y tenemos otros 700 expedientes en trámite», destacó.
La certeza jurídica, destaca el director de la Coesvi, permite a las familias tener acceso a los programas de mejoramiento de vivienda y lo más importante, tranquilidad en que la casa donde viven nadie se las podrá quitar y que es un patrimonio para sus hijos.
Regularizar las miles de viviendas no es una tarea sencilla, hay terrenos donde hay un litigio entre dueños y líderes invasores, donde se afecta a compradores, lo que está haciendo la Coesvi es dialogar con todas las partes involucradas para alcanzar acuerdos.
En esta tarea de negociaciones también está haciendo su parte el Ayuntamiento y el Insus.
Sobre la necesidad de contar con una reserva territorial en la ciudad de Durango para ofrecer lotes a familias de escasos recursos, el director Fernández Saracho anunció que está solicitando recursos este 2023 para iniciar negociaciones.