Por: Silvia Ornelas

Se llevó a cabo el foro en el Senado de la República, donde se analizó la creación del Plan Nacional de Prevención y Control Integral de Cáncer, así como la política pública que se requiere para frenar esta “pandemia silenciosa”, que en México representa la tercera causa de muerte.

La presidenta de la mesa directiva, Olga Sánchez Cordero, afirmó que la lucha contra el cáncer tiene que ser una causa conjunta, “sin tintes partidistas”, debe ser abordada con la convicción de servicio para orientar los cambios que se requieran y contar con mejores herramientas interinstitucionales para su tratamiento.

Esta enfermedad en 2020 fue responsable de 90 mil 603 defunciones en México y durante la última década no se ha podido frenar su tasa de mortandad.

Uno de los mejores escenarios es la detección temprana, pero, a pesar de los esfuerzos institucionales, por lo general solo entre 30 y 45 por ciento de los casos se detecta a tiempo.

El foro contó con 28 expertas y expertos en torno a los beneficios que podría tener un eventual Plan Nacional de Prevención y Control Integral del Cáncer.

La presidenta de la Comisión de Salud, Lilia Margarita Valdez Martínez, destacó la importancia del diagnóstico temprano, pues actualmente pasan de tres a seis meses para que una institución diagnostique a un paciente con esta enfermedad.

Dio a conocer que se trabaja una iniciativa para que, cuando se sospeche que alguien tiene cáncer del tipo que sea, las instituciones cuenten con un protocolo para que determinen en no más de 10 días si es así o no.

El senador Miguel Ángel Mancera Espinosa refrendó el compromiso del PRD para que México cuente con un plan de atención y prevención del cáncer.

Por su parte, Mancera Espinosa advirtió: “Por eso es urgente que pongamos manos a la obra en estas tareas que aquí se han reiterado en muchas ocasiones y que van dirigidas a la prevención”.

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