La obra de la potabilizadora en Garavitos, ubicada en la carretera Mazatlán, enfrenta una intensa manifestación liderada por transportistas de carga, quienes denuncian favoritismo y desigualdad en las oportunidades laborales. Según el líder de los manifestantes, José Santos González, la protesta ya suma 10 días sin recibir respuesta por parte de los responsables.
El conflicto surge por la falta de claridad en los acuerdos laborales. No existe un contrato firmado, y los transportistas acusan al encargado de la constructora, identificado como el señor Quintana, de beneficiar a un grupo selecto de trabajadores dejando de lado a los demás. La situación ha llevado a los manifestantes a tomar medidas más drásticas, como impedir el suministro de alimentos y agua al sitio de la obra.
Los manifestantes aseguran que quedan 15 días para que se termine la obra, pero ponen en duda esa información. Argumentan que, si esto fuera cierto, el encargado permitiría la participación de los transportistas excluidos. Además, critican la preferencia hacia ciertos trabajadores cercanos al encargado, lo que consideran un acto de favoritismo y compadrazgo.
Los transportistas demandan igualdad en el trabajo y oportunidades equitativas, exigiendo que se respete su derecho a laborar sin discriminación.
Por: Víctor Salas