Las vacas están perdiendo peso por deshidratación, sequía más calor es una combinación letal, opinó el encargado de asuntos ganaderos de la CNC, Héctor Núñez.
“Hay mayor riesgo de muerte de animales por sed que por falta de alimento”, expresó.
Cuestionado sobre el impacto negativo de la tercera onda de calor que ha elevado las temperaturas a máximos históricos en el país, incluyendo Durango, Héctor Núñez recordó que desde la CNC ha alertado con anticipación de los efectos del cambio climático en el sector ganadero.
Desafortunadamente -productores y autoridades- no han adoptado medidas extraordinarias para enfrentar lo que hoy estamos viviendo como son largos periodos de estiaje y altas temperaturas, condición que año con año se ira agravando.
“Yo he andado en algunos pueblos y ya no hay agua en los aguajes, ni en los pozos, y las vacas están adelgazando pero más por deshidratación que por alimentación, es una realidad, este clima está atacando muy fuerte sobre todo al ganado mayor, externó”.
La combinación calor y sequia, esta haciendo un efecto muy devastador en el ganado, es una bomba para la sobrevivencia de las vacas.
El experto en temas ganaderos considera que debemos prevenir estos escenarios que son irreversibles, no podemos contra la naturaleza y debemos adecuarnos, lo más urgente es captación de agua superficial, de las lluvias, porque de nada sirve perforar pozos cuando tenemos mantos friáticos secos.
La prioridad numero uno para el sector ganadero debe ser agua y en segundo termino pasto, porque la pastura como quiera se consigue pero el agua no.
Por: Antonio Gaytán