Por: Brenda Maurer
Hoy la fila en el Centro Histórico no fue para honrar a San Jorge Bendito en el día de su celebración.
La fila era para el banco. Las puertas de la Catedral no se abrieron para que los fieles llevaran flores, velas y otras ofrendas.
Hoy la petición de “San Jorge Bendito, amarra a tus animalitos con tu cordón bendito”, tuvo que hacerse desde la casa, en medio del aislamiento social por el azote de una pandemia.
San Jorge, fue traído a esta ciudad local por el Obispo Esteban de Tristán, por medio de una imagen, la cual fue colocada y venerada por los duranguenses, con motivo de buscar la protección de animales ponzoñosos y sobre todo de los famosos alacranes que abundan dentro de la ciudad.
Cada año la imagen de bulto de San Jorge, es colocada en el altar de la Catedral Basílica para ser adorada por miles de fieles duranguenses, quienes se acercan para pedir por su protección especialmente la de los infantes, llevando además como símbolo de agradecimiento una velita y un ramo de flores.
Sin embargo, en esta ocasión y ante la contingencia por la que se está pasando la tradicional romería no se pudo llevar a cabo, de tal manera que la misa de celebración fue virtual.