Durango, Dgo.- Astrid, es una mujer e 29 años de edad que labora como intendente en un centro hospitalario de la ciudad y recientemente vivió una terrible experiencia que no le desea a ninguna otra mujer.

Astrid salió de su trabajo ya por la noche y al caminar por las inmediaciones de la plaza Cuarto Centenario, fue interceptada por los ocupantes de una camioneta color blanco, doble cabina, dos de los cuales bajaron para subirla por la fuerza, enseguida le pusieron un trapo entre la boca y nariz, lo que le provocó repentino sueño.

Desde esos momentos, la mujer ya no supo nada de ella hasta que despertó o recobró el conocimiento en el hotel Gallo, ése que se ubica en las calles 5 de Febrero y Progreso, del centro de la ciudad, por lo que se trasladó a su domicilio sin decir nada a su familia y al día siguiente regresó a trabajar.

Al comentarle a una persona de mucha confianza lo que le sucedió, ella le aconsejó que presentara una denuncia ante el Ministerio Público, para que elementos de la Policía Investigadora de Delitos (PID) trabajaran en el caso y se diera con los autores de esa pesadilla.