Por: Adrián Esquivel
Pueblo Nuevo, Durango.- Luego de las declaraciones del gobernador de Durango, José Aispuro Torres, quien manifestó que se tendrá una sequía durante los próximos meses, el alcalde de Pueblo Nuevo, Adrián Chaparro Gándara, indicó que iniciarán las gestiones para pedir apoyo para esta inminente sequía, ya que el agua en la presa La Rosilla se está terminando.
Hoy en día, esta presa abastece más de 90 por ciento de la población en la cabecera municipal, sin embargo, cuenta con solo un 50 por ciento de su capacidad de almacenamiento y en muy poco tiempo habrá sequía y escasez de agua.
Por lo anterior, el mandatario municipal manifestó que estarán solicitando la intervención y apoyo tanto del Gobierno del estado como del Gobierno Federal, en caso de que sean necesarias pipas para trasladar agua a los domicilios, si no se registran lluvias en los próximos meses.
«Una solución a este problema de vaso de agua en esta cabecera municipal es la construcción de la nueva presa, proyecto al que se le sigue dando seguimiento para tratar de revertir esta situación», concluyó el mandatario municipal.
Te puede interesar: Realizan actividades de prevención contra incendios forestales