Por: Perla Meraz
Guadalupe Victoria.- Las aguas negras de las lagunas de oxidación se vierten en cultivos de maíz, pero además el ganado las bebe y luego su carne se ofrece al público luego de sacrificarse en el rastro municipal, denuncia que confirmó Lucio Ayala, presidente de la Asociación Ganadera Local.
Explico que pese a su insistencia las administraciones siguen pasando, y nadie toma el tema con seriedad.
Pues desde la gubernatura de Jorge Herrera Caldera, el entonces gobernador hizo el compromiso de que se construiría una planta tratadora de aguas residuales, sin embargo, dicha obra no se ha concretado al momento, y la problemática sigue vigente con la propagación de bacterias que al final terminan siendo consumidas por los victorenses.
Pues se supone que las aguas negras, una vez que pasan por los filtros, solo pueden ser usadas en sembradíos de forraje.
Pero esto no se respeta, y dichas aguas se llevan a sembradíos más alejados, para usarse incluso en maíces.
Ya que hay el registro de varias personas que han roto las tuberías para extraer aguas sin tratar y regar dichos sembradíos.
Luego venden en la ciudad elotes crudos y cocidos, lo cual, en el punto de vista de Lucio Ayala, equivale al consumo de aguas negras.
Otra anomalía es que las lagunas de oxidación cuentan con cuatro filtros, pero el primero no está funcionando.
Por lo que quedan solo tres, y el agua es tomada del primero y segundo cuando a simple vista se observa que siguen siendo aguas negras.
Por último, el presidente advirtió que, la carne que proviene del rastro esta también contaminada, pues sacrifican ganado que durante meses ha estado consumiendo aguas de la laguna de oxidación, ya que tienen libre acceso a esta zona.