A finales de mayo se registró que el Sol emitió la llamarada más fuerte desde octubre de 2017, según el  Observatorio de Dinámica Solar de la NASA (SDO).

Esto podría representar un “despertar” de la estrella pues es una explosión de radiación provienen de las manchas solares.

En las observaciones se cuenta que los parches fríos de la superficie se han tofo y se aprecia la fuerza de calor en el Sol.

La NASA dio a conocer que este fin de semana se contó con la llamarada más fuerte, por lo cual las rachas de calor pueden ser intensas.

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Sin embargo, el suceso no significa un problema adverso para la Tierra, pues las erupciones o quiebres de los parches no están dirigidos hacia el planeta.

“Las manchas solares pueden ser presagios del aumento del Ciclo Solar del sol. No se sabe si son solo un cambio temporal o un cambio a una nueva fase más activa durante unos meses”, comentaron.

El proceso para la detección consta de observaciones de 6 horas donde se realizan conteos de las manchas solares.

“los científicos necesitan ver el aumento constante de los números antes de poder determinar exactamente cuándo estaban en el fondo”, dijo la NASA.