La Unión Europea (UE) ha impuesto una multa de 345 millones de euros a TikTok, la famosa plataforma de vídeos cortos, por vulnerar la ley de protección de datos de los menores de edad. La sanción se basa en una investigación realizada por la Comisión de Protección de Datos irlandesa (CPD), el principal organismo regulador de la UE en esta materia, que encontró varias irregularidades en las prácticas de TikTok.

Según el CPD, TikTok no garantizó la privacidad ni la seguridad de los datos personales de los usuarios menores de 18 años. Entre otras cosas, el CPD descubrió que las cuentas de los menores se creaban como públicas por defecto, lo que permitía que cualquier persona pudiera ver y comentar sus vídeos. Además, la función de “conexión familiar”, que supuestamente permitía a los padres controlar la actividad de sus hijos en la plataforma, no verificaba correctamente la relación parental.

TikTok tendrá que abonar la multa y adaptar sus operaciones para cumplir con las normas de la UE en un plazo de tres meses. La empresa, que tiene su sede europea en Dublín, expresó su “respetuoso desacuerdo” con la decisión y afirmó que ha mejorado sus medidas de protección a los menores desde que comenzó la investigación. Según TikTok, solo en los primeros tres meses de este año eliminó casi 17 millones de cuentas en todo el mundo por sospechas de que pertenecían a menores de 13 años.

No es la primera vez que TikTok se enfrenta a problemas legales por su gestión de los datos personales

En febrero de 2023, la empresa acordó pagar 92 millones de dólares para resolver una demanda colectiva en Estados Unidos por violar la privacidad de sus usuarios. En abril del mismo año, la Autoridad Garante para la Protección de los Datos Personales italiana ordenó a TikTok bloquear el acceso a los usuarios cuya edad no estuviera verificada.

TikTok es una de las redes sociales más exitosas del momento, con más de mil millones de usuarios activos al mes en todo el mundo. Sin embargo, también ha sido objeto de críticas y controversias por cuestiones como la censura, la desinformación, el acoso o la adicción. La multa impuesta por la UE es un nuevo revés para la empresa, que tendrá que demostrar su compromiso con el respeto a los derechos y la seguridad de sus usuarios, especialmente los más vulnerables.

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