En una votación sin precedentes, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó el miércoles un paquete de gastos por un total de 460 mil millones de dólares. Este acuerdo permitirá mantener el financiamiento para algunas de las agencias federales clave durante el resto del año fiscal, evitando así una posible parálisis del gobierno.

Ahora, el foco se centra en el Senado, que tiene previsto debatir esta iniciativa antes de la fecha límite del viernes a la medianoche. Los legisladores están trabajando arduamente en un segundo paquete de seis iniciativas, entre las que se encuentra una en materia de defensa, con el objetivo de asegurar el financiamiento completo para todas las agencias federales antes del plazo del 22 de marzo. Se estima que el gasto discrecional total establecido por el Congreso para todo el año sea de alrededor de 1,66 billones de dólares.

La oposición de los republicanos en Estados Unidos

Sin embargo, encontrar este acuerdo no ha sido fácil. Un notable número de representantes republicanos se han opuesto a los paquetes de gastos, lo que ha llevado al presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, a utilizar un proceso expedito para llevar la iniciativa a votación. Este proceso requiere que dos terceras partes de la cámara baja voten a favor del acuerdo para su aprobación. Finalmente, la Cámara de Representantes aprobó la medida con un contundente resultado: 339 votos a favor y 85 en contra.

Este acuerdo histórico representa un paso importante hacia la estabilidad financiera del gobierno y el funcionamiento adecuado de sus agencias clave. El panorama político en Estados Unidos se encuentra en tensión mientras el Senado se prepara para debatir este acuerdo vital. Todos los ojos están puestos en los próximos días, ya que la fecha límite se acerca y las decisiones tomadas tendrán un impacto significativo en el futuro del país.

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