El expresidente argentino Alberto Fernández enfrenta una grave acusación por supuesta malversación de fondos. Se le imputa haber contratado irregularmente seguros para empleados públicos durante su mandato, mediante un intermediario privado.

La prensa local y el juez a cargo de la causa han confirmado esta imputación, que ha sacudido al país. Es la primera vez que Fernández es investigado como expresidente por un delito de corrupción.

Según la agencia oficial Telam, Fernández habría contratado a un “bróker y empresas privadas” para gestionar los seguros en dependencias oficiales. El extitular de la empresa pública Nación Seguros, Alberto Pagliano, y el corredor Héctor Martínez Sosa, esposo de la histórica secretaria privada de Fernández, María Cantero, también están imputados.

El fiscal federal Ramiro González señala en su dictamen que la investigación podría abarcar a otras personas involucradas en las supuestas maniobras. La causa está asignada al Juzgado federal número 11, del magistrado Julián Ercolini, quien deberá decidir si ratifica o rechaza la imputación.

Defensa de Alberto Fernández

Fernández, quien ocupó la presidencia de Argentina entre 2019 y 2023 por el Frente de Todos (centro-izquierda), ha intentado desvincularse de las acusaciones. En una entrevista al diario La Nación, responsabilizó a su secretaria por las presuntas irregularidades. “Dudo que ella haga una cosa así; si lo hizo, no lo avalo (…) No puedo garantizar que ella no haya hecho una cosa así; si fue así, se extralimitó”, expresó.

El mandato de Fernández estuvo marcado por desafíos como la pandemia de covid-19 y la renegociación de la deuda externa. El país recibió una ayuda financiera récord del Fondo Monetario Internacional, pero también sufrió un aumento de la inflación, la pobreza y la indigencia. Sin embargo, se registraron avances en la actividad industrial y la tasa de empleo.

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