Florida, Estados Unidos.- Las imágenes de los fanáticos sin cubrebocas dentro del estadio en el Super Bowl y las fiestas en los Estados Unidos han dejado a la alcaldesa de Tampa y a los funcionarios frustrados después de que enfatizaron la importancia de las reglas COVID-19.

Para cumplir con los protocolos de coronavirus, la NFL cortó a la multitud en el Estadio Raymond James en Tampa, Florida por debajo de los 25 mil en un estadio que normalmente tiene unos 66 mil fanáticos, y requirió que se usaran cubrebocas.

Pero fuera del estadio, se podía ver una multitud de fanáticos que no usaban máscaras o practicaban el distanciamiento social celebrando la victoria de los Tampa Bay Buccaneers por 31-9 sobre los Kansas City Chiefs.

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La gente vitoreó, se apiñó en los bares y se abrazó en varios puntos calientes alrededor de la ciudad y pululaba por las calles, muchos sin máscaras.

La alcaldesa de Tampa, Jane Castor, dijo que «la mayoría» de las personas y las empresas siguieron las reglas después de que se entregaron 200 mil cubrebocas antes del Super Bowl, pero que vio algunas imágenes preocupantes.

«Es un poco frustrante porque hemos trabajado muy duro», dijo después del partido. «En este punto de lidiar con COVID-19, hay un nivel de frustración cuando ves eso».

Horas más tarde, durante otra conferencia de prensa, los comentarios de la Sra. Castor fueron un poco más positivos. Dijo que la mayoría de las personas que vio celebrando estaban enmascaradas.

«Me enorgullece decir que la mayoría de las personas que vi y que disfrutaron de las festividades asociadas con el Super Bowl estaban cumpliendo», dijo.