En el Ministerio de Defensa de Alemania se confirmó lo que desde el 1 de marzo ya se divulgaba en redes: la filtración de una llamada entre altos mandos militares, en la que se discutía la entrega de misiles Taurus a Ucrania, filtración atribuida al espionaje que –supuestamente– ejecuta Rusia en contra de aliados de occidente, con fines no de conocer los movimientos de sus oponentes. Bueno, no totalmente… sino de desinformar.

Comunicaciones de militares no están comprometidas, aseguran en Alemania

La veracidad de la llamada de más de 35 minutos de duración fue confirmada por el ministro de Defensa de Alemania, Boris Pistorius, quien aseguró que, pese a que se diga lo contrario, los sistemas de comunicación de los alto mandos militares de su país no fueron comprometidos… la filtración se debió “un error individual”.

“Aquí ocurrió un error grave que no debería haber ocurrido”, admitió  Pistorius. De acuerdo con el funcionario alemán, uno de los participantes de la videoconferencia en la que altos mandos discutían la entrega de misiles a Ucrania se unió a ésta desde “una conexión no autorizada”… por eso alguien ajeno logró interceptar la comunicación. Casi, casi, fue pura suerte… dice.

Fue un “golpe aleatorio en el marco de un enfoque amplio”, aseguró Pistorius, quien dice que ya entró en comunicación con todos los aliados militares de su país y, pese a lo ocurrido, aseguraron que la confianza en Alemania es “inquebrantable”.

De acuerdo con la autoridades, la llamada en cuestión era dirigida por el inspector general de la Fuerzas Aérea alemana, Ingo Gerhartz. Su filtración se dio en canales de propaganda rusos, lo cual, según especialistas (y confirmado por el ministro de Defensa de Alemania) apunta al tipo de guerra que ahora ejecutará Vladimir Putin: una guerra híbrida.

¿Qué es una guerra híbrida?

Entre los especialistas en cuestiones bélicas, una guerra híbrida es teoría en estrategia militar que apunta al uso de todos los medios posibles para darle en la torre al enemigo. No sólo con armas, sino con propagación de información e intervención en procesos vitales para el desarrollo de un país (en elecciones, por ejemplo).

“Esto significa que tenemos que estar preparados para cualquier forma de guerra, incluida una guerra híbrida, una guerra de información, una guerra de desinformación, porque este es un ejemplo muy claro de ello”, señaló Pistorius.

¿Qué se dice en Alemania sobre el tema?

Aunque no es sorpresa que Rusia aplique operaciones de espionaje, el experto en seguridad James Davis comentó que esta reciente acción sirvió para dejar en evidencia que Alemania ha descuidado sus capacidades militares… lo cual acabó por dañar su relación con sus socios en la OTAN.