Un estudio reciente, publicado en la revista Journal of Biology, ha revelado la detección de la cepa H5N1 del virus de la gripe aviar altamente patógena en aves de la ciudad de Nueva York, Estados Unidos. Este hallazgo corresponde al periodo invernal de 2021 a 2022 y ha suscitado inquietudes acerca de la posible transmisión del virus a humanos y otras especies.

Investigadores realizaron un seguimiento intensivo de las aves urbanas, recolectando 1,927 muestras de excrementos en diversos parques y áreas verdes de la metrópoli. De este conjunto, se identificaron seis aves portadoras del virus H5N1, entre ellas un ratonero de cola roja, tres barnaclas canadienses, un halcón peregrino y un pollo.

A pesar de estos resultados, los expertos aseguran que el riesgo de contagio para las personas y mascotas en Nueva York es bajo. No obstante, recomiendan precaución, sugiriendo evitar el contacto cercano con animales silvestres.

Implicaciones de la gripe aviar en zonas urbanas

La presencia del virus en una ciudad tan poblada plantea un riesgo potencial, especialmente por la interacción entre aves migratorias y la densa población humana. Aunque la transmisión de la gripe aviar a mamíferos ha sido escasa a nivel global, un caso reciente en Texas, donde un trabajador agrícola se infectó posiblemente de una vaca, ha elevado la preocupación de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Además de las aves, mamíferos como zorros, mapaches, zarigüeyas, zorrillos, focas, felinos grandes y pequeños, así como perros y gatos domésticos, pueden contraer la gripe aviar. Incluso el ganado bovino y caprino no está exento de riesgo. Por ello, es crucial mantener una vigilancia constante de la circulación del virus en áreas urbanas. Ante esto las hautoridades han recomendado a los ciudadanos seguir las medidas de precaución y estar al tanto de la evolución de esta situación.

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